Finalmente Google no tendrá que vender Chrome
En un fallo histórico que promete transformar la industria del marketing digital, Google no se verá obligado a vender su buscador web, Chrome, ni su sistema operativo móvil Android. Sin embargo, se ha prohibido sus acuerdos exclusivos en Search con fabricantes de dispositivos y proveedores de servicios de internet (ISP). La orden fue emitida, ayer 2 de septiembre, por el juez Amit Mehta en un tribunal de Washington D.C., tras un juicio que ha durado un año. Hace casi un año, el juez Mehta falló inicialmente en contra de Google. Durante este tiempo (noviembre de 2024), los abogados de ambas partes presentaron sus argumentos y reclamaciones, cuando el Departamento de Justicia formalizó su moción para forzar la venta de Chrome.
Acciones impuestas a Google
Además de la prohibición de acuerdos exclusivos, Google deberá compartir ciertos datos de índice de búsqueda e interacción de usuario (excluyendo datos de anuncios) con parte de la competencia y ofrecerles servicios de sindicación de búsqueda y anuncios de texto en términos comerciales. Esta medida busca ayudar a que los rivales desarrollen ofertas competitivas. Adicionalmente, Google deberá realizar cambios significativos en sus subastas para asegurar la transparencia en los precios de los anuncios de búsqueda y prevenir la manipulación encubierta de precios. El fallo concluye que el Departamento de Justicia "excedió su alcance al buscar la desinversión forzada de estos activos clave". Sin embargo, establece que "Google tendrá prohibido entrar o mantener cualquier contrato exclusivo relacionado con la distribución de Google Search, Chrome, Google Assistant, y la app de Gemini".
Reacciones y próximos pasos
Tras el fallo, Google ha anunciado su intención de apelar la sentencia. Se espera que su equipo legal presente las mociones necesarias en las próximas fechas. Durante el juicio inicial, la defensa de Google argumentó que su éxito se debe al ofrecer el mejor producto en Search, y que los acuerdos de distribución eran legales y no exclusivos, permitiendo a los consumidores elegir Google sobre sus rivales sin coerción. Los defensores de Google también sostuvieron que los argumentos del gobierno contravienen el espíritu de la legislación antimonopolio de EE. UU. Organizaciones como American Enterprise Institute han argumentado que el impulso para desmantelar Google está motivado por un deseo de "castigar" a la empresa, sin fundamento legal. Además, el equipo de defensa de Google destacó cómo sus competidores (Microsoft, OpenAI y Perplexity) están aumentando la competencia en Search con la aparición de tecnologías de inteligencia artificial. Por separado, la fase de recursos de la investigación antimonopolio de Google que involucra a su suite AdTech, la cuál también podría asumir una posible desinversión forzada por el tribunal, está programada para comenzar formalmente el 22 de septiembre.